La Fundación FC Barcelona apoya la causa de las personas refugiadas con mensajes de jugadores y jugadoras del primer equipo

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La entidad trabaja para mejorar la calidad de vida de niños y jóvenes refugiados en Cataluña, Grecia, África, Asia y América Latina a través de programas propios y colaboración con ACNUR-UNCHR

Con motivo de la celebración el 20 de junio del Día Internacional de los Refugiados, jugadores y jugadoras de los primeros equipos de fútbol del FC Barcelona, han grabado mensajes de apoyo para las personas refugiadas de todo el mundo. El compromiso del Club con la causa de las personas refugiadas se ha llevado a cabo tanto a través de proyectos propios como en alianza con otras organizaciones y entidades, visibilizándose de forma especial gracias a la alianza global que se firmó con la Agencia de Naciones Unidas por los Refugiados (UNHCR-ACNUR) en 2022 y que ha permitido que los primeros equipos de fútbol masculino, femenino y el Fundación Barça Genuine luzcan el logotipo de esta organización en el dorso de la camiseta.  

Los jugadores del primer equipo masculino Pau Cubarsí, Fermín y Joao Felix han enviado mensajes de apoyo a las personas refugiadas y migrantes explicando la labor que realiza la Fundación y poniendo en valor los proyectos que lleva a cabo tanto en Cataluña como en otros lugares del mundo. Asimismo, Ilkay Gundogan, y las jugadoras del primer equipo femenino, Aitana Bonmatí y Lucy Bronze, que son colaboradores de alto perfil de ACNUR-UNHCR, han grabado vídeos de apoyo a las personas refugiadas a través de la campaña conjunta de sensibilización que han difundido ambas entidades.  

Gracias a alianza con ACNUR-UNHCR, la Fundación FC Barcelona está presente en cuatro países de diferentes continentes: Turquía, Uganda, Malasia y Colombia, que, a causa de diferentes problemáticas y conflictos geopolíticos, acogen a personas refugiadas y desplazadas internas.

Programas propios

La Fundació FC Barcelona trabaja desde 2017 en programas propios con personas refugiadas. En el caso de Europa, lo hace en Grecia, con entidades locales griegas en los campos de refugiados que acogen a niños y familias refugiadas provenientes de diversos países en conflicto, y también en Cataluña, en diferentes proyectos dirigidos a personas refugiadas y migrantes, como el proyecto Jóvenes Futuro + con la Fundación La Caixa, que proporciona atención psicosocial y mentoría con la posibilidad de inserción laboral a jóvenes migrantes y refugiados que han perdido el apoyo de la Administración pública al cumplir la mayoría de edad.

En Latinoamérica, lleva a cabo en Colombia el proyecto "Deporte como mecanismo de cambio" que se desarrolla en tres localidades, Arauca, Buenaventura y Tumaco, de tres departamentos distintos, de la mano de Save the Children y el apoyo de Scotiabank. En este caso, se apoya tanto a familias venezolanas refugiadas (Colombia es el país que acoge el mayor número de personas venezolanas que han salido de su país en los últimos años) así como familias enteras desplazadas internamente por los conflictos armados que todavía sufre el país.

En todos los casos, en la labor de la Fundación en favor de la causa de los refugiados se utiliza el deporte como herramienta mágica para que los niños y niñas refugiados de todo el mundo puedan transformar en positivo sus vidas, pero lo hace desde un enfoque holístico, para que tenga un impacto real y directo en aspectos como el acceso a la salud y la atención médica, la educación de calidad y la igualdad de oportunidades para un futuro digno.

Un degoteo imparable

El número de personas refugiadas y desplazadas en el mundo es un goteo dramático e imparable año tras año. Según ACNUR, Actualmente 108,4 millones de personas en todo el mundo se han visto obligadas a huir de sus casas a causa de conflictos, persecuciones, violencia o violaciones de derechos humanos. Las niñas y los niños constituyen el 41% de la población desplazada por la fuerza y esta cifra no deja de crecer con los nuevos conflictos armados en distintos lugares del mundo.

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