No han perdido ni un partido y se han llevado a LaLiga Genuine, la DICUP y The Original Challenge, pero lo más importante de la primera temporada del Fundación Barça Genuine ha sido la buena evolución personal de sus jugadores y jugadoras.

Campeón de las tres competiciones en las que ha participado, invicto, con 12 victorias y dos empates, si éste fuera un equipo cualquiera, la valoración de su temporada de estreno merecería la máxima puntuación. Pero el Fundación Barça Genuine no es un equipo cualquiera: su razón de ser es la integración de las personas con otras capacidades a través del fútbol y, en ese aspecto, el balance de su primer año también es inmejorable.

“Ha sido una preciosa temporada, en todos los terrenos. Lo habría sido igualmente sin haber ganado este torneo, pero llevarse otra Copa a casa nos hace mucha ilusión”, comentaba uno de los miembros del cuerpo técnico, Josep Ferré, en Daytona (Florida), después de cerrar el curso en el que ha compartido una experiencia fantástica con sus jugadores y jugadoras, que culminó con la consecución de 'The Original Challenge', el triangular con el Orlando City y el Nàstic de Tarragona que reunía, por primera vez, equipos inclusivos de Europa y de América. Ferré era igualmente elocuente en Bilbao, unas semanas antes, cuando el Fundación Barça se coronó campeón del grupo Compañerismo de LaLiga Genuine con un pleno de nueve victorias. “En septiembre creamos el equipo, con mucha ilusión y con un mundo por descubrir. Cada entrenamiento, cada amistoso, cada fase de LaLiga Genuine, ha supuesto un aprendizaje para todos: jugadores, jugadoras, entrenadores y entrenadoras. Todo ha crecido muy rápidamente y estamos muy satisfechos. No sólo porque hemos ganado partidos, sino también por cómo lo hemos hecho”, decía.
 
En la misma línea se expresaba Beth Puigdesens, una de las psicólogas del equipo: “Los chicos y chicas del Fundación Barça han experimentado un crecimiento muy grande. Son personas que venían con unas mochilas muy cargadas y poder formar parte de un equipo como éste, de un Club como el Barça, les ha hecho crecer mucho. Tina González, Francesc Martínez y yo misma les hemos dado apoyo psicológico, sobre todo para controlar sus emociones e impulsos a través de un seguimiento personalizado”.

¿Y qué dicen los protagonistas? ¿Cómo han vivido los jugadores y jugadoras del Fundación Barça esta temporada? ¿Qué han sacado? ¿Qué han aprendido? Abel Bau, por ejemplo, ha dejado de ser Abélix después de adelgazar ¡50 kilos!. Llevar el escudo del Barça le ha motivado a conseguirlo. Otro de los porteros, Sergi Rodríguez, asegura que "además de defender la portería, ahora sé defender unos valores". Kamaal El Yachou, trabajador incansable, ya sabe lo que es “trabajar en equipo”. Miquel Chavarría, además de hacer un montón de goles, ha aprendido "a compartir y escuchar". Marc Povedano ha progresado mucho con el balón en los pies y, además, ahora le cuesta menos relacionarse con la gente. Amine Bachir, delantero genial e imprevisible, ya no es “tan cerrado como antes”. Salva Vidal, el autor del gol en el último segundo que permitió ganar a LaLiga Genuine, asegura que se ve “más centrado”. Dani Rodríguez, un defensa siempre bien colocado, ya no se enfada tanto y tiene más ganas de hacer cosas.

Guillem Anglès, al igual que se atreve a salir con el balón controlado desde atrás, también se atreve "a hacer cosas que antes no hacía". Jenny Cabanillas proclama, con una sonrisa en la boca, que ha encontrado “¡una familia espectacular!”. Montse Durà dice que el mejor día de la semana es el lunes, “porque es cuando nos entrenamos”. Marc Cutillas está contento porque ya sabe lo que es el fuera de juego. Y Marc Jiménez es feliz como nunca antes lo había sido después de haber viajado “a Málaga, Bilbao y Estados Unidos”. ¿Se puede pedir más? Continuará la próxima temporada.