El equipo de balonmano lleva las Pulseras blaugranas de la Fundación Barça a los niños, niñas y jóvenes del Hospital de Sant Pau

Las Pulseras Blaugranas, el símbolo de la solidaridad culé con los niños y jóvenes que padecen enfermedades graves, han sido la gran novedad de la visita que este lunes han hecho los jugadores de balonmano del FC Barcelona en el área de Pediatría del Hospital de Sant Pau. Una visita que se inscribe dentro del programa “Navidad todo el año” de la Fundación FC Barcelona y que fomenta las visitas de los equipos profesionales del Club a diferentes grupos en situación de vulnerabilidad.

Dika Mem, Luis Frade, Petrus, N’Guessan, Juan Palomino, Aleix y Pol Valera, del primer equipo de balonmano, han formado parte de la expedición azulgrana que ha visitado a los niños ingresados en la planta de pediatría de este centro sanitario.

Estas visitas suponen un importante refuerzo emocional para los pacientes y forman parte de la terapia para afrontar los duros tratamientos y los procesos de recuperación por el impacto positivo que suponen en el estado de ánimo de los menores y de sus familias, que agradecen mucho estas visitas. La magia del Barça es para todos estos niños y niñas, en estos momentos tan duros desde el punto de vista vital, un momento de gran alegría que les hacen vivir sentimientos y emociones muy positivas, un factor que puede ser clave para afrontar las enfermedades e incluso mejorar su pronóstico, según confirman todos los equipos médicos de los hospitales.

Todos los jugadores lucieron una pulsera azulgrana y entregaron una también a los niños ingresados que visitaron el Hospital de Sant Pau.

La pulsera blaugrana, con los colores del Barça, se inspira en la famosa serie de televisión Pulseras Rojas y simboliza la solidaridad de la familia culé hacia los niños más vulnerables. Mejorar el bienestar emocional de niños y adolescentes durante largas estancias en el hospital, y acompañar al menor y familiares, con una atención más amable y humanizada en momentos tan delicados y difíciles es su principal objetivo. Gracias a la magia del Barça, los pacientes pueden olvidar por un día el sufrimiento y la angustia aportando al mismo tiempo autoestima, felicidad y olvido.

Gracias a los beneficios obtenidos por la venta de las Pulseras Blaugranas por parte de la Fundación Barça se crearán espacios y ambientes que humanicen y acompañen de forma más amable al niño o adolescente durante su estancia en el hospital o cuando reciba cuidados paliativos a domicilio. Asimismo, pretende potenciar terapias innovadoras complementarias al tratamiento médico convencional como la terapia asistida con perros, deporte, arte y otras iniciativas que supongan una mejora en el bienestar y la evolución de la enfermedad.